Bendito sea el dolor

Entre vapor y llovizna
la promesa quisimos sellar
de encontrarnos otra vez
para a la luna aullar

con un beso acordamos
que no quedarí­an resabios
cuando te viera de nuevo
y mordimos nuestros labios

lamentaste haber mordido
mi carne y un dolor darme
al punto de detenerte
sin que me oyeras quejarme

no quiero que me dejes
y en la distancia te pierdas
quiero que te quedes conmigo
aunque hasta desangrar me muerdas

los restos aún pegados
de ese viejo falso amor
siguen adentro mí­o
y siento todo su ardor

no quiero esos vestigios
que se clavan en mi alma
quiero el dolor en la carne
con el que me traes la calma

aunque sienta todo el dolor,
mis ojos lloren y sangre mi piel,
si no digo la palabra
tu castigo me sabrá a miel

Nuestras mentes esta noche
alcanzaron sincroní­a...
Que con gemidos y gritos
compongamos sinfoní­a!

comenzamos lentamente
levantándote la falda
terminamos en el fuego
con tus uñas en mi espalda

desprecio... al falso amor
bendito... sea el dolor