Irresponsables:

H - Ewan Dusk: dirección y redacción

Hellin Dusk: diseño y redacción

Byron: redacción y edición



Matridemonio (I)

Este sujeto quizás necesito algo grueso q le dé calor en invierno y algo amplio q le haga sombra en verano, y la dama buscaba alguien q le hiciera las compras dado q no cabe por la puerta del super. Una relación simbiótica... freakie, bué...
Pero vayamos a otros casos. No necesariamente de parejas desparejas estamos hablando, sino de necesidad. Es decir... q hace la gente para ponerse en pareja? Necesitar... no sé... lo q sea!
"La gente no se enamora. Se ponen cachondos y asustados. Temen al mundo, así q cuando encuentran a alguien q les hace sentir menos miedo y q les pone, se aferran a esa persona y le llaman amor" -dicho por Sexton Furnivall, personaje de Neil Gaiman en Muerte: el alto coste de la vida (DC-Vertigo Comics)
Esta declaración es, cuando menos, casi perfecta (exageramos? me importa un r...)
Escuahron alguna vez alguna lastimera canción de algún melódico rogándole a su novi@ q no se vaya? Ok, espero q no pero si lo hicieron quizás hayan escuchado en alguna algo como "no soy nada sin tí" o "me diste algo q nadie más me dió" o algo con un significado similar. El punto es: la gente se pone en pareja porq se da cuenta de su propia debilidad y busca alguien con una debilidad complementaria q de algún modo imprecisable lo haga creerse más fuerte.
Pero no debe ser así, jamás de los jamases.
En la naturaleza, la etapa de la temprana juventud es una de las mayores en cuanto a tasa de mortalidad; quienes sobreviven a depredadores, sequias, enfermedades o lo q venga son quienes tienen el derecho merecido de aparearse y tener hijos. Suena drástico: el fuerte sobrevive y ama, los demás solo mueren.
Acaso puede tener derecho a sobrevivir una especie q reconoce sus debilidades a tal punto de considerarlas cosas de todos los días y parte de sus naturalezas? No esperamos q exista el ser perfecto (y de hecho hayamos repulsivo a quien se cree como tal) pero aplaudiremos con las manos, no las del cuerpo sino las del alma, cuando alguien busque llegar a serlo. Y entre estas cosas exista su poder de elegir, lejos del instinto deformado por generaciones de jeropas o de viejos travestis portadores de cruces.
Como siempre, nos respaldamos en algo q nos dijo el tío Fede en Elso Spech Zarathustra:
Tú eres joven y deseas para ti hijos y matrimonio. Pero yo te pregunto: ¿eres un hombre al que le sea lícito desear para sí un hijo? ¿Eres tú el victorioso, el dominador de ti mismo, el soberano de los sentidos, el señor de tus virtudes? Así te pregunto. ¿O hablan en tu deseo el animal y la necesidad? ¿O la soledad? ¿O la insatisfacción contigo mismo? Yo quiero que tu victoria y tu libertad anhelen un hijo. Monumentos vivientes debes erigir a tu victoria y a tu liberación Por encima de ti debes construir. Pero antes tienes que estar construido tú mismo, cuadrado de cuerpo y de alma.[...] Pero lo que llaman matrimonio los demasiados, esos superfluos, - ay, ¿cómo lo llamo yo? ¡Ay, esa pobreza de alma entre dos!
Como sea... "casate y serás feliz" decían en una época... "cazate-la y cortate-la" antes de cometer el error, y no serás feliz, pero tendrás la razón lo cual es mejor para el hombre verdadero.
Así habló el Reporte Flagelín Nº45...

No hay comentarios.: