En una ocasión estuvimos en el Estadio Ciudad de Lanús Nestor Díaz Perez, mejor conocido como LA FORTALEZA, Adi, Hellin, su padre y yo (The H). Había tanta gente en la popular q nos vimos obligados a ir a la platea de los viejitos. Esa noche perdimos por un inmerecido gol contra un equipo extranjero y quedamos eliminados de la copa Libertadores (no viene al caso decir cual era el equipo).
Hellin era todavía una nena chiquita (...) y al terminar el partido, aplaudiendo con lágrimas en los ojos a nuestros guerreros, q aunque no alcanzó se jugaron todo, me preguntó:
- Y ahora? Nos quedamos afuera de la copa? -y sus lágrimas me partían mi sintética alma
- Sí, pero todavía peleamos el torneo clausura local.
- Pero q pasa si no podemos?
- Después viene el apertura. Y también la Copa Sudamerciana.
- Pero es igual de dificil.
Hellin quedó en duda, insegura y pensativa durante unos minutos mientras la tribuna visitante se vaciaba. La podía notar de reojo, claramente preocupada.
- Simplemente -continué- mientras exista el club, mientras existan jugadores nacidos acá y, sobretodo, mientras exista la gente q les dá fuerza y espera por ellos, siempre habrá posibilidad de un futuro, y un torneo más.
Esa noche, sentada en la platea de butacas granates como nuestra sangre, Hellin sonrió entre sus lágrimas, aplaudió a un gran equipo q se marchaba...
...y aprendió lo q es la esperanza.
The H
No hay comentarios.:
Publicar un comentario